La pandemia mundial ha hecho que muchas personas en pueblos rurales costarricenses, populares entre los turistas, hayan perdido su puesto de trabajo pero las mujeres en Boca Tapada han estado trabajando duro.
En asociación con Fundación CRUSA, en Macaw Recovery Networ lanzamos un programa piloto para que 10 mujeres locales se unan a nuestro equipo de campo de el Gran Guacamayo Verde durante la temporada de reproducción de aves.
Andrea, Carmen, Elvida, Geylin, Justina, Karina, Lilliam, Yendri, Yerlin y Maria Elena se convirtieron en mujeres guardabosques de la comunidad. Han monitoreado los nidos de guacamayos durante meses y he hicieron un esfuerzo adicional, asumiendo el trabajo de conservación para proteger a los loros en el Neo trópico de la extinción.
Las mujeres comenzaron el programa con clases de conservación con nuestro equipo y nuestros socios en la Reserva Las Arrieras, Refugio Lapa Verde, Corredor Biológico San Juan La Selva y Centro Científico Tropical. Luego, las guardabosques se pusieron las botas y se pusieron a trabajar. Durante los últimos tres meses, ayudaron al equipo de campo a llegar a diez sitios más de anidación y tres nidos más de guacamayos silvestres. Al concluir el programa piloto, María Elena, una de las guardabosques más jóvenes, inspiró a otros a unir fuerzas en un proyecto de recuperación del hábitat.
Las Mujeres Guardabosques han aprendido que los peligros críticos que enfrenta el Gran Guacamayo Verde y otras especies silvestres en su país son la deforestación y la caza furtiva. María Elena propuso que su equipo mantuviera un vivero comunitario propio, ofreciendo voluntariamente su trabajo en esta etapa inicial. El equipo trabajará con otros a nivel local para proporcionar alimentos y fuentes de anidación para los guacamayos como parte de los esfuerzos de reforestación en curso.
Para nosotros, no hay mejor manera de garantizar el futuro de nuestro medio ambiente y recursos naturales que uniendo a las personas y a las comunidades para la Conservación. Estamos conmovidos y emocionados de ver que eso es exactamente lo que están haciendo las Mujeres Guardabosques. Cada mujer está germinando semillas de Mountain Almond en sus hogares y esperan tener 500 semillas germinando para fines de junio. ¡Para cuando este nuevo programa esté totalmente financiado, las damas planean plantar 6,000 almendros de montaña, el hábitat natural de los guacamayos, en los próximos dos años!
Mientras tanto, estamos liderando conversaciones con miembros del gobierno local para incorporarlos y encontrar una parcela de tierra adecuada para el vivero. También brindaremos capacitación en liderazgo para que las Mujeres Guardabosques coordinen su proyecto entre sus familias y vecinos para la recuperación del Gran Guacamayo Verde.
Una vez más confirmamos que en la unidad nos hacemos más fuertes y juntos podemos prosperar.
Estamos sembrando una semilla de esperanza, seguros de que todos la veremos crecer.
¡Esperamos que María Elena y estas guardabosques se unan en el desarrollo de valiosos esfuerzos de reforestación, para que las comunidades puedan unirse para la conservación!
Pamela Herrera
Gerente de Integración Comunitaria